La afluencia de inmigrantes que, han llegado a diferentes países de la Unión Europea, ha generado, inevitablemente, crisis en aquellas ciudades de acogida. La Comisión de derechos humanos debate acerca de ello.
Exceptuando un partido, los demás explicitan su apoyo a los inmigrantes que viven tan duro proceso, formándose así un bloque interno. Ahora bien, los puntos en debate conciernen los métodos que deben implementarse para controlar el flujo migratorio, dado que, en los Estados es evidente la falta de recursos para auxiliar a los migrantes, quienes, en busca de un lugar que les provea de condiciones de vida más dignas, se hallan, en una situación de discriminación. Se propone con el fin de acabar con esta problemática, generar entre los habitantes nativos de los lugares de acogida, una concientización acerca de los beneficios de la diversidad.
Por otra parte, la mención a ideologías raciales hechas por del partido Grupo Europa de las Naciones y Libertades causa gran controversia, del mismo modo como la revelación que hace el Partido Popular Europeo, al reconocer y responsabilizarse de haber tomado parte de un proceso de documentación y reubicación ilegal con inmigrantes en Italia y Grecia.
Ambos partidos son sancionados, uno por faltar a la esencia misma de los derechos humanos acudiendo a opiniones
étnicas fuera de lugar; el otro por haber faltado a la ley, no obstante, se le reconoce su colaboración con la comunidad pese a la gravedad de los hechos narrados.
MarÍa Juliana Sánchez